El uso de gas para cocinar es de lo más habitual, siendo una práctica diaria, por lo que de tan habituados que estamos a hacerlo, tal vez llega un momento en el que la mecánica nos impide ver cómo conseguir el máximo ahorro en el consumo de gas en la cocina. Simplemente cocinamos, pero podemos olvidarnos de hacerlo de la manera más eficiente para controlar mucho mejor los gastos del hogar.
Sin embargo, el mantenimiento de la cocina en el día a día es básico para no consumir demasiado y no solo como consecuencia del tiempo que está el gas encendido mientras se elaboran los platos. Hay una serie de consejos que puedes poner en práctica de manera sencilla para economizar tu consumo y ahorrar en la factura del gas en la medida de lo posible.
Los trucos para ahorrar en el consumo de gas en la cocina incluyen elegir los materiales más apropiados de utensilios que se usen o mantener en buen estado los fogones y los quemadores, que van a sufrir desgaste por el uso durante años. Además de otros como la descongelación previa de los alimentos para que estén a una temperatura ambiente si vas a calentar comida que tenías guardada en el congelador.
Igualmente, el ahorro económico vendrá de la mano de tener tarifas de gas como Flexi Gas Hoy.
6 Consejos para ahorrar en el consumo de gas en la cocina
En Podo queremos darte estos seis consejos para ahorrar lo máximo posible sin dejar de cocinar lo necesario. Sabemos que es imposible dejar de estar en la cocina todos los días preparando la comida y la cena.
Y, precisamente por eso, con un poco de previsión y cuidado es posible el ahorro diario y llevar a cabo un uso eficiente del gas y del consumo energético en los hogares. Máxime valorando lo cara que está la vida, los precios de los alimentos y la cesta básica de la compra.
Todo cuenta para ahorrar en las facturas de la luz y del gas. Conocedores de que no eres una persona derrochadora cuando toca ajustar y controlar los gastos, ¿por qué no sigues estas recomendaciones para reducir el consumo de gas en casa?
Resumen:
- 1. Cocinar comida totalmente descongelada
- 2. Usar utensilios de cocina de acero inoxidable
- 3. Mantener en buen estado los utensilios
- 4. Apagar el fuego antes de terminar de cocinar
- 5. Limpiar los quemadores cocina de gas
- 6. Controla que el color de la llama del gas sea azul
1. Cocinar comida totalmente descongelada
Comenzamos con una recomendación que puede parecer de poca importancia, pero que no lo es. La comida tiene que estar totalmente descongelada, a temperatura ambiente.
Si vas a preparar un plato con alimentos frescos, no hay problema, pero si usas comida que has guardado en el congelador, tanto ya preparada y solo las va a calentar, como sin cocinarla antes, sácala y déjala fuera por lo menos desde la noche anterior -si es para comer- o por la mañana -si es para cenar-.
En el caso de que la comida no esté totalmente descongelada, necesitarás más tiempo para calentarla, es decir, tendrás el fuego más tiempo encendido, consumirás más cantidad de gas y la factura será más cara. Los alimentos a temperatura ambiente, menos calientes, requieren de menos tiempo al fuego, con un consumo de gas inferior.
2. Usar utensilios de cocina de acero inoxidable
Proseguimos con este consejo: lo mejor es usar utensilios de cocina de acero inoxidable y no de otros materiales. ¿Qué ventajas tiene el acero inoxidable que permiten reducir el consumo de gas en la cocina? Algunas muy sencillas e importantes:
- Se calienta antes, por lo que se tarda menos tiempo en calentar la comida.
- Transmite mejor el calor, consiguiendo una temperatura apropiada a todos los ingredientes y alimentos.
A la hora de comprar ollas, cazuelas o sartenes, evita las que estén hechas de hierro fundido, un material que si bien distribuye mejor el calor interno, requiere de más tiempo para alcanzar una temperatura óptima. Eso significa que hace falta tener más tiempo el gas encendido, aumentando su consumo y gasto económico.
Por otro lado, los utensilios de cocina fabricados de barro son muy útiles para las cocciones lentas de platos como sopas o estofados, pero tienen la desventaja de que son más frágiles.
3. Mantener en buen estado los utensilios
Además de elegir el mejor material posible, el segundo punto es el mantenimiento en buen estado de los utensilios de cocina. El objetivo es que duren el mayor tiempo posible, no comprar ollas a presión o sartenes cada poco tiempo.
Para lograrlo, asegúrate de limpiar bien la superficie después de cada uso, de manera que sea más fácil y efectiva la distribución del calor usando la menor cantidad de gas posible. Si las superficies no están en buen estado, notarás que necesita más tiempo al fuego, lo que conllevará cada vez mayores consumos.
Asimismo, te aconsejamos que compres cacerolas, ollas o sartenes del mismo tamaño o más grandes que los fuegos de la cocina. Si son más pequeños, las llamas se irán por los lados, provocando un consumo de gas mayor del necesario cada vez que cocines, así como un mayor riesgo de quemaduras.
Unos utensilios de un tamaño más grande que el perímetro de la llama te garantizará que todo el fuego se dirige a calentar la comida y no se desperdicia nada. Aprovecha este consejo sencillo para conseguir más ahorro en tu hogar..
Para ello, valora las opciones que hay para ahorrar gas en toda tu casa gracias a servicios de mantenimiento de gas natural que engloban no solo la cocina, también la caldera o el cuarto de baño.
Ahorra gas en la cocina con 6 sencillos consejos, como apagar el fuego antes de terminar de cocinar o controlando que la llama del gas sea de color azul.
4. Apagar el fuego antes de terminar de cocinar
En cuarto lugar, tienes que controlar el tiempo que tiene el gas encendido mientras cocinas, que no sea más del necesario. Este punto lo tienes que valorar para ahorrar en el consumo de gas antes de meter los ingredientes en la sartén o en la olla, además de en el momento de apagar el fuego cuando el plato esté listo.
Lo más óptimo es comenzar a preparar la comida con el fuego alto y, después, bajar la intensidad y dejarla a fuego lento. Para acabar, apaga el fuego antes de terminar de cocinar, de manera que el plato termine de hacerse aprovechando el calor acumulado, no hace falta tener la llama encendida hasta el último momento.
5. Limpiar los quemadores cocina de gas
Seguimos con otros consejos sencillos para ahorrar en el consumo de gas en casa mientras cocinas, en los pasos previos a la elaboración de los platos. La limpieza es básica, como acabamos de ver, en el mantenimiento de los utensilios, pero no te olvides tampoco de limpiar los quemadores de la cocina de gas.
El procedimiento para limpiarlos, como bien sabes, es sencillo: solo tienes que desarmar la cocina retirando los quemadores, metiéndolos en agua caliente durante al menos una hora para reblandecer la suciedad adherida y, finalmente, frotarla.
Igualmente, la propia salida del fuego debe estar limpia en el fogón, por lo que debes limpiarlo con un palillo o un alfiler, por ejemplo, para quitar la suciedad que se queda pegada. Hazlo con mucho cuidado y siempre con la cocina fría.
6. Controla que el color de la llama del gas sea azul
El último consejo que te damos para que reduzcas el consumo de gas en la cocina es controlar el color del gas. ¿Te has fijado si el gas es de color amarillo, naranja o azul? Seguro que sí, pero a lo mejor no conoces el significado que tiene: cada color refleja el tipo de combustión del gas.
La llama del gas de color azul significa que la combustión es correcta, no se consumo ni más ni menos del necesario cada vez que se enciende. Sin embargo, las llamas del gas de color amarillo o naranja significa que la combustión no es correcta. Es decir, que hay algún tipo de fallo que provoca un uso ineficiente del gas, lo que afecta al tiempo que tarda en calentarse correctamente.
Así que, asegúrate que la llama del gas es azul, el rendimiento será el más adecuado y no gastarás más dinero porque la cocina de gas funcione mal. Igualmente, detectar a tiempo una mala combustión te hará llamar al servicio técnico para detectar si hay algún tipo de avería, por lo que evitarás problemas de seguridad y peligros en la cocina.
Y hasta aquí los seis consejos que te queremos dar desde Podo para que consigas ser más eficiente y tengas el máximo ahorro en el consumo de gas en casa. No son complicados, al contrario, además de muy efectivos para gastar menos dinero en la factura del gas. Tu bolsillo te lo agradecerá.
